



El ransomware es un tipo de software malicioso que bloquea el acceso a tus archivos o sistema y exige un rescate para liberarlos. Es como si alguien entrara a tu casa, cerrara todas las puertas y ventanas, y te pidiera dinero para devolverte las llaves.
Para protegerte del ransomware, es importante hacer copias de seguridad de tus archivos importantes y NO abrir correos electrónicos o enlaces sospechosos.
El phishing es una técnica utilizada por los hackers para engañarte y que reveles información personal, como contraseñas o números de tarjeta de crédito. Es como si alguien se hiciera pasar por un amigo y te pidiera que le des tus cosas valiosas.
Para evitar el phishing, verifica siempre la autenticidad de los correos electrónicos y enlaces antes de hacer clic en ellos.
El malware es un término general para cualquier software malicioso que daña o interfiere con el funcionamiento de tu computadora. Puede ser un virus, un gusano o un troyano, y es como si alguien entrara a tu casa y rompiera tus cosas.
Para protegerte del malware, asegúrate de tener un buen antivirus y evita descargar software de fuentes no confiables.
El DDoS (Distributed Denial of Service) es un tipo de ataque en el que múltiples sistemas comprometen un solo objetivo, como un servidor, sitio web o servicio, con el fin de sobrecargarlo y hacerlo inaccesible para los usuarios legítimos. Es como si un grupo de personas decidiera bloquear la entrada a una tienda, impidiendo que los clientes reales entren.
Para protegerte de los ataques DDoS, es importante contar con medidas de seguridad adecuadas, como firewalls y sistemas de detección de intrusiones.